Resumen:Juan Valencia (1928-1990) se dedicó a intentar explicar el mundo y cuál era, y sería, su misión en el mismo, pero a pesar de su continua y angustiosa meditación sobre la esencia del ser humano y su trascendencia, se fue sin terminar de hallar una solución que pacificara sus ansias. Antonio Soler, albacea del poeta, gracias a cuya generosidad se publica ahora su obra inédita, advirtió que “murió con el sabor de la derrota en los labios”. Casi un cuarto de siglo después de la desaparición del jerezano parece llegado el momento de dar a luz estos versos que piden ser leídos.