Resumen:A una obra como la de Rafael Perez Estrada (Málaga, 1934 - 2000) puede uno acercarse por distintos motivos y de muchas maneras. Un modo de leer sus libros es extrayendo de ellos sus itinerarios, sus rutas, sus viajes. De la obra de Rafael podría deducirse una China, un Japón, una Málaga o un Chelsea imposibles y reales a la vez, lejanos y a la vuelta de la esquina, espectrales como abrazos y carnales como destellos. Como la India, otro país que aparece y desaparece de sus libros. A la India Rafael le dedica unos 25 fragmentos en sus libros. LA suya es una India de ecos, pero es tan intensa y necesaria que estos ecos se convierten en voces. (Texto extraido del prólogo del libro a cargo de Jesús Aguado, igual que la selección de poemas).